Para terminar de completar el post anterior del censo de buitres, os dejo con unas tomas de uno de los hambrientos buitres que se tiró como un poseso el primero a por la comida. Debía de estar bien hambriento, aunque no por ello descuidaba levantar la cabeza cada cierto tiempo para controlar que todo estaba en orden y no había “monos en la costa”
Fue con el que más me encanté fotografiándolo. Intentando componer algo interesante o pillarlo en algún momento oportuno. Del resto de comensales tengo muchas, pero ya hemos dado suficiente la brasa, así que lo dejamos aquí.
A mi, la que más me gusta….esta:
saludos