Bueno, de mi visita a tierras catalanas estas navidades pude disfrutar una mañana entera de una de las mayores riquezas de la que goza el área metropolitana de Barcelona. Se trata del espacio natural del Delta del Llobregat , un auténtico paraiso en mitad del amasijo de hormigón, ruido y contaminación en que se están convirtiendo las grandes ciudades. Una especie de pulmón de vida natural en forma de humedal.
Estuvimos visitando la zona conocida como Cal Tet, una serie de humedales en la parte final de la desembocadura del río Llobregat. Se trata de un complejo humedal abastecido de manera artificial, que reune una serie de lagunas muy bien conservadas y con algunos puntos de observación, tanto al aire libre como en forma de observatorio.
Durante todo el recorrido a pie por senderos claramente marcados vas pasandos junto a estos complejos lagunares disfrutando en todo momento de las especies que los habitan. En su mayoría aves acuáticas aunque con algunas sorpresas más que agradables.
Es fácil sorprender a las Fochas comunes en sus quehaceres diarios o a los zampullines, así como a los cormoranes que te sobrevuelan con relativa asiduidad.
También disfrutamos en los miradores y observatorios de los vuelos de caza del fantástico aguilucho lagunero, pues nos sobrevoló en varias ocasiones.
Ya metidos en los observatorios más camuflados y descansando del paseo nos degustamos con un sinfín de aves que emplean estas lagunas como zona de caza, descanso, o refugio.
Cormoranes, garzas, garcetas, anade real, zampullines, fochas, gaviotas, pato cuchara, lavanderas, tortugas y un largo etcétera, son el innombrable grupo de aves de las que pudimos disfrutar en su deambular por las lagunas.
Sin duda un rincón plénamente recomendable para quien pueda disfrutar de unas horas de naturaleza en estado puro. Va a ser sin duda uno de los sitios a los que volveré en cada visita a Barcelona.
Estando tan cerca del Aeropuerto del Prat, el tráfico aéreo era constante sobre nuestras cabezas durante la visita al delta. Primero pensé que sería una molestia para las aves, pero muy al contrario, ni se inmutaban cada vez que pasaba algun armatoste de semejante tamaño y ruido.
Aproveché para echar algunas fotos…..
Saludos
Pues tienes toda la razón, entre tanto ruido, tanta edificacion, tanto coche y tanto de todo se hace raro que tengamos tan cerquita de casa un pulmón como ese, algunos ya lo descubrimos hace algún tiempo y lo disfrutamos de vez en cuando. Un saludo
Voy a colgarlo en el Facebook para que lo puedan ver mis colegas espero que no te importe.
Hola, que majestuosidad de los aviones: Como decía mi padre: No sé cómo se podrán mantener en el aire de su peso… Menudo tamaño!!
Las aves, están muy acostumbradas al ruido de los aviones cuando viven al lado, igual que nos pasa a los valencianos con los de Manises, tanto es el ruido en Manises que a 10 kilometros en Valencia, que o te renuevas y te acostumbras o te tienes que ir a veces.
Impresionante reportaje. Un 10